Científicos italianos realizaron un estudio que reveló que es extremadamente peligroso para las mujeres comer pasta, ya que aumentan drásticamente el riesgo de enfermedades cardiovasculares. Esta conclusión fue posible gracias a las observaciones de 47 mil mujeres y hombres.
Durante la observación, los voluntarios tenían la misma dieta, que incluía pasta y pan blanco. Como resultado, las mujeres comenzaron a aumentar de peso rápidamente, mientras que los hombres no se recuperaron en absoluto. Con respecto a las enfermedades vasculares y cardíacas, resultó que la probabilidad de su aparición en las mujeres se duplicó. La razón de esto es que la pasta, que se digiere muy rápidamente, altera el equilibrio de azúcar en la sangre.
Los científicos advierten: las mujeres deben abstenerse de la pasta hecha de harina premium. Al mismo tiempo, la pasta de trigo duro es extremadamente útil: la presencia de una gran cantidad de fibra en ellas garantiza la saciedad, como resultado de lo cual hay una quema activa de calorías.
Los nutricionistas también recomiendan comer pasta precalentada, no solo cocida. El hecho es que, durante el calentamiento, el almidón se vuelve resistente, sin aumentar el nivel de azúcar en la sangre.
